sábado, 15 de noviembre de 2008

¿Para qué? Paranoia



Esta tarde, haciendo la compra, me ha llamado la atención el cartel de la imagen. En principio no parece que haya nada extraño en él, pero yo he conseguido detectar el mensaje subliminal.
"Cuartos traseros de pollo familiar". No estamos ante un anuncio de un blister de pollo con cantidad suficiente de alimento para una familia, no. Esa es la pantalla legal. Estamos ante el desmembramiento de un pollo calificado como familiar. Un pollo que al terminar su jornada en la granja se va directo para el gallinero, saluda a sus gallinas y polluelos, picotea unos granos de mijo rodeado de los suyos, se entretiene un poco viendo lo que echan en las otras jaulas y plancha la cresta hasta las siete de la mañana del día siguiente.
Alguien pensará que esto es una exageración y un sinsentido. Pues no. Es puro marketing. Vamos a ver, estamos hablando de cuartos traseros. ¿Cúal te comerías, el de un pollo familiar o el de un pollo casquivano y crápula al que la noche le confunde?
Ni que decir tiene que todo el mundo exige un pollo decente.

3 comentarios:

Sebastián Puig dijo...

Jajajajaja... y ja. Me he reído lo indecible. Gracias por este momento.

"un pollo casquivano y crápula al que la noche le confunde..." Demasiado pal body.

Anónimo dijo...

Muy bueno "caminillo", estás pasando a la categoría de escritor de culto.
juan

hitlodeo dijo...

Hola rythmduel, ya sabes consume pollos decentes.
Hola Juan. Voy cerrando etapas. Una era no sé que (superada), otra escribir un libro (estamos en la fase de prácticas)y me falta montar en globo.
Un abrazo a los dos.